SOBRE IML’s (segunda parte)

El pasado 27 de febrero se aprobó definitivamente en la Mesa Sectorial, la convocatoria del concurso específico para la provisión de los puestos de Jefatura de Sección de las Unidades de Valoración Forense Integral, tal como se propuso en la Mesa del pasado 14 de febrero.

El punto más importante, por discutible, resultado de la misma, fue que la DGJ ha asumido la propuesta realizada por CCOO, y sus asesores/as, sobre las puntuaciones máximas a valorar en cada una de las fases del concurso específico reguladas en los articulos 49 y 48 del RD 1451/2005 sobre Ingreso y Provisión de Puestos de Trabajo y Promoción Profesional del Personal al Servicio de la Administración de Justicia. Ello implica que la Comunidad Valenciana será “pionera” en la interpretación de los citados artículos. 

De acuerdo con esta propuesta, la Administración puede establecer el máximo de puntuación en cada una de las fases, siempre que se encuentre por debajo de la puntuación máxima contemplada por la legislación. En la práctica, se establece que la puntuación máxima para la fase de méritos generales será de 60 puntos (en lugar de hasta los 72 previstos para comunidades con lengua propia), y de 40 para la fase de méritos específicos (en lugar de los 43 puntos). Concretando aún más, significa dar relevancia a “otros méritos”, respecto de la antigüedad y el idioma propio, que se valorarán respectivamente hasta 37 puntos (de los 45 previstos) y 8 puntos (de los 12 previstos).

Dicha interpretación no es baladí, en el momento en el que nos encontramos de próximos traslados y jubilaciones. Desde UGT consideramos que, la interpretación realizada por la Administración, a propuesta de CCOO, es muy forzada. Consideramos que la puntuación máxima establecida en la legislación no es negociable, sino que son las puntuaciones máximas que deben de valorarse en las distintas fases de los concursos específicos, sin que ningún candidato pueda obtener una calificación en la segunda fase del concurso que sobrepase el 40% de la suma total de las dos notas. Garantía de que las funciones propias de puesto sean valoradas, por encima de otras tareas como las docentes o investigadoras.

De momento, solo queda esperar a la publicación de los concursos. Hasta entonces, os recomendamos que cada cual valore el asunto. Por nuestra parte, llegado el momento, no descartamos la interposición de los recursos previstos en la ley.